La comunicación corporativa también se ha visto afectada por la transformación digital de las empresas y de la sociedad en general. El sector ha vivido cambios muy profundos desde la aparición de Internet: los diarios digitales, un nuevo modelo de pago, la publicidad online y los encuentros virtuales, por poner varios ejemplos.

Tal y como lo predijo Martin Baron, director de The Washington Post, considerado por muchos como el mejor director de periódicos del mundo. “Los periódicos en papel no van a sobrevivir. Vivimos en un mundo digital dominado por el teléfono móvil. La gente lee las noticias mientras camina por la calle, mientras espera el autobús, mientras hace cola en el supermercado… La mayoría de los ciudadanos, y especialmente los jóvenes, recibe la información de manera digital y a través de las redes sociales. Esa es la realidad, y tenemos que vivir en la realidad”.

Pero la transformación digital, que tanto pavor produjo en su día a los periódicos y a los medios en general, puede ser también una gran oportunidad para el sector de la comunicación. Las redes sociales han posibilitado la aparición de nuevas profesiones dentro del sector y, además, son una fuente de datos valiosísima para que los profesionales del sector podamos ofrecer contenidos más alineados con lo que nuestros públicos demandan.

Big Data en comunicación. La revolución que supone contar con una ingente cantidad de datos para los departamentos de comunicación todavía es incalculable. Pero está claro que los Dircom necesitan tener conocimientos de esta disciplina para poder comprender los miles de datos que generan sus audiencias y stakeholders y acertar en sus estrategias empresariales. De hecho, el 72% de Dircom opina que el Big Data cambiará de forma profunda su profesión, según un estudio de la European Public Relations Education and Research Association (Euprera) y la European Association of Communication Directors (EACD) llevado a cabo en 2016 con la participación de más de 2.700 profesionales.

¿Por qué su importancia? Gracias a las herramientas que facilitan el tratamiento y medición de datos, un Dircom puede conocer en tiempo real el impacto que tiene un mensaje ante su público: si es valorado; rechazado; comentado; y gracias a ello, predecir si su marca logrará o no sus objetivos empresariales. Es decir, hoy en día los departamentos de comunicación corporativa se han convertido en potentes cajas de resonancia que tienen acceso a datos de gran valor para las marcas si son bien utilizados y tratados por profesionales con conocimiento de la materia.

Posibilidad de KPIs. El Big Data también puede ser la solución al eterno dilema de los KPIs en comunicación. Por fin, hay herramientas que pueden calcular si un mensaje ha llegado a la audiencia y conocer el impacto que ha tenido. De este modo, será el Dircom quien deberá decidir qué KPIs analizar para saber si la estrategia escogida es la correcta o se requiere un cambio de rumbo.

Sacar conclusiones de los datos que manejamos para transmitir mejor los valores de nuestra marca y sus mensajes clave es, sin duda, uno de los grandes retos de futuro para el Dircom. Saber anticiparnos a las demandas de nuestras audiencias es todavía un lujo al alcance de una empresa con las herramientas adecuadas. Pero en el futuro puede que sea la norma.