Jonás Fernández es Diputado del Grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas en el Parlamento Europeo. Licenciado en Economía por la Universidad de Oviedo y MBA por el IESE, ha trabajado en el despacho Solchaga, Recio & Asociados y ha sido profesor asociado en la Universidad Carlos III. En 2014 se incorporó como eurodiputado al Parlamento Europeo en representación del PSOE.
Recientemente fue uno de los invitados en el Public Affairs Lab, el primer laboratorio de ideas e innovación sobre asuntos públicos en España impulsado por MAS Consulting y la Facultad de Económicas de la Universidad de Navarra.
El eurodiputado Jonás Fernández señaló la importancia de los lobbies en la Unión Europea: “Forman parte de la deliberación pública y contribuyen a mejorar la profundidad del debate público con el objetivo resolver los posibles conflictos políticos que como sociedad afrontamos”.
Regulación del lobby en la Unión Europea
En relación con la regulación del lobby, Fernández recordó que “en España no existe una regulación de sobre el lobby como tal, mientras que en la Unión Europea existe y es voluntaria”.
Fernández explicó que “los lobistas que se inscriben en el Registro de Transparencia, que es totalmente público y puede consultarse en la web del Parlamento europeo, consiguen una acreditación, similar a la de los periodistas, que les permite entrar en el parlamento y tener contacto directo con los eurodiputados”, añadió Fernández.
En Bruselas encontramos dos tipos de lobistas: por un lado, los lobbies, que pueden ser empresariales o no empresariales (ONG, asociaciones religiosas, etc.), por otro lado, las agencias de asuntos públicos, que representan a terceros que los contratan para trasladar su posición a la mesa de negociación de las instituciones comunitarias.
¿Cómo se relaciona un eurodiputado con un lobby?
Gracias a la acreditación que consiguen los lobistas cuando se registran, estos pueden acudir a las reuniones de los comités y pueden solicitar una cita presencial con los eurodiputados: “Nosotros, como eurodiputados, debemos comunicar al Parlamento europeo las reuniones que mantenemos con los lobistas y especificar los motivos. Por ejemplo, si la mantenemos en el marco de la tramitación de algún expediente legislativo, o bien porque somos ponentes para la redacción de un reglamento o una directiva”.