1. Sin mayorías claras para la formación del Gobierno. Las elecciones generales dejan un tablero político en el que no hay una mayoría clara para formar gobierno. El PP y VOX se quedan a 7 escaños de la mayoría absoluta, mientras que Pedro Sánchez sólo podría gobernar si logra el apoyo de Sumar y de los partidos nacionalistas e independentistas, un escenario factible. En cualquier caso, no es descartable una repetición electoral antes de que acabe el año.
2. Amarga victoria para Feijóo. El líder del Partido Popular afrontaba estas elecciones con el viento a favor tras la victoria en las autonómicas. Sin embargo, las expectativas que generaron los populares durante la campaña, hablando incluso de alcanzar la mayoría absoluta, se le han vuelto en contra. Pese a ser ganador en número de votos y escaños, Feijóo tendrá difícil formar gobierno.
3. Pedro Sánchez aplicó su manual de resistencia. Con todo en contra, el líder del Partido Socialista le ha dado la vuelta a lo que pronosticaban las encuestas y ha conseguido incluso mejorar los resultados de 2019. Apoyado en una intensa campaña, especialmente en la última semana, ha conseguido movilizar a la izquierda y tiene la posibilidad de formar gobierno.
4. El voto oculto ha sido para el PSOE. En todas las elecciones existe un voto oculto que las encuestas no detectan y, en esta ocasión, ese voto ha sido del PSOE. De hecho, el Partido Socialista ha mejorado sus resultados respecto a 2019.
5. Sumar logra peores resultados que Unidas Podemos. A pesar de que la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, no ha mejorado los resultados de Unidas Podemos en 2019, ha conseguido salvar los muebles y tendría posibilidades de seguir en el Gobierno en caso de que Sánchez consiga los apoyos para formar una mayoría.
6. Vox baja en escaños pero se mantiene como tercera fuerza. Pese a que ha perdido 19 escaños, la formación de Santiago Abascal ha resistido y se mantiene como la tercera fuerza más votada. No ha sido una campaña fácil para VOX, que ha sido el blanco de ataques desde ambos lados del tablero ideológico. De hecho, la apelación al voto útil del PP le ha complicado el poder sumar finalmente con VOX.
7. El independentismo y el nacionalismo pierden fuerza, pero serán decisivos. Tanto el independentismo catalán como el vasco pierden representación en el nuevo Congreso de los Diputados. Especialmente llamativo es lo sucedido en el País Vasco donde, por primera vez, Bildu ha superado al PNV, seis escaños a cinco. Respecto al independentismo catalán, ERC pierde 6 escaños y Junts uno. Aún así, serán indispensables para que Pedro Sánchez pueda formar un gobierno.
8. Los sondeos fallaron. Las encuestas han sido uno de los principales asuntos de debate en esta campaña. La mayoría de ellos apuntaban a que el bloque de la derecha lograría la mayoría absoluta o estaría cerca de ella y no ha sido así.
9. La campaña electoral resultó clave. El PSOE llegaba a estas elecciones con todas las encuestas en contra y con un partido desmovilizado tras las elecciones del 28 de mayo. Sin embargo, la campaña que ha liderado el candidato socialista, con su gira por los medios de comunicación y la movilización de la izquierda, ha permitido que Sánchez tenga opciones de seguir en La Moncloa.
10. Se abre un periodo de incertidumbre. Las próximas semanas van a estar marcadas por una gran incertidumbre en la que tienen que dirimirse los posibles pactos en ambos bloques. Los que auguraban el inicio de un nuevo escenario de cambio político en España tendrán que esperar.