La tecnología se ha revelado como un arman fundamental para hacer frente al Covid-19 en todos los países del mundo. No es algo nuevo el hecho de que el desarrollo de las redes 5G y sus nuevas tecnologías están llamadas a revolucionar, ente otras muchas cosas, el mundo de la sanidad y la salud pública. Esta pandemia ha puesto de manifiesto como estos avances han sido claves hasta el momento y sin duda lo serán más aún en el futuro.
La telemedicina
A la hora de evitar el colapso de nuestro sistema sanitario ha resultado fundamental que todos los pacientes de Covid u otras patologías que pudieran ser atendidas a distancia contarán con buenos sistemas de conexión con los profesionales sanitarios. Esto ha permitido descongestionar la atención hospitalaria a la par que mantener los servicios a quienes lo necesitan. Pese que esta es una fase mu precaria de la telemedicina, todos los expertos coinciden en que en un futuro esta práctica será cada vez más común y completa, limitando nuestras visitas a los hospitales y consultas médicas.
El big data para descifrar al virus
Se han utilizado aplicaciones del Big data que han permitido “rastrear” al virus en tiempo real y que los científicos entiendan su comportamiento. Algo fundamental para ver las mutaciones, controlar su expansión e identificar su virulencia. Esto era impensable hace apenas pocos años, pero esta pandemia ha puesto de manifiesto que en cuanto a velocidad de información el ser humano a ganado mucho terreno a los virus. En un futuro, estas velocidades podrían ser mucho más altas incluso que ahora.
Machine Learning
Se espera que el Internet de las Cosas suponga una verdadera revolución en la manera de concebir el mundo digital. En el aspecto sociosanitario, la Inteligencia Artificial, las comunicaciones de tipo máquina a máquina y la capacidad de autoaprendizaje de programas tendrán repercusiones cruciales a la hora de diagnosticar y valorar una enfermedad. Esto ya ha comenzado a emplearse en la lucha contra el Covid y en un futuro serán herramientas de alta precisión para mejorar los servicios y atención sanitarias.
Geolocalización y controles de movimientos.
Sin duda, este es un arma de doble filo, ya que dentro de su uso sanitario se puede esconder un uso político y autoritario. Sin embargo, lo cierto es que la capacidad de establecer conexiones a través de nuestra información móvil es fundamental para controlar una epidemia. De esta forma en países como Corea del Sur, tras detectar un rebrote en una discoteca, en menos de 5 días habían localizado, aislado y realizado test a los asistentes a estos locales. Que este uso será clave en un futuro es innegable, que deberán ponerse límites regulatorios parece que también es un consenso generalizado.
Impresión digital 3D
Aunque lo realmente impactante de la tecnología de impresión 3D se derivará de la posibilidad de crear prótesis o incluso órganos humanos a través de la Bioimpresión 3D, en esta pandemia su uso tampoco ha sido desdeñable. Hasta hace pocos años, era casi imposible pensar que un ciudadano desde su domicilio iba a poder imprimir máscaras, EPIS, pantallas y otros elementos claves en la lucha contra una pandemia. Cuando estas tecnologías se desarrollen y alcancen su potencial su impacto sanitario será también fundamental.
Estos son solo algunos ejemplos de las muchas posibilidades que nos depara el futuro y que en la lucha contra esta pandemia se han mostrado como relevantes. Sin duda, los avances tecnológicos en el ámbito socio sanitario se verán reforzados tras el paso de esta crisis, haciéndonos estar más preparados para las venideras.