Una de las cuestiones que se analiza en el Postgrado de Dirección de Campañas Electorales de MAS Consulting Group y la Universidad Pontificia Comillas es la comunicación de los partidos políticos y cómo mantienen sus estrategias de comunicación en periodo de campaña, gobierno u oposición.

Para conocer de cerca la comunicación del Partido Popular, Alfonso Serrano, Responsable del Área Electoral del PP y Diputado de la Asamblea de Madrid, explicará las herramientas y planes desarrollados por el partido actualmente en el gobierno de cara a las elecciones europeas de este año y municipales y autonómicas del próximo.

A pesar de que quede algo más de un año los equipos de campaña trabajan desde hace tiempo en las municipales y autonómicas de 2015, una cita que, según declara Serrano, “el PP acepta con mucha responsabilidad”. Estas son las respuestas de Alfonso Serrano a nuestra entrevista:

¿Cómo se enfrenta el PP a las elecciones autonómicas y municipales de 2015?

Se afrontan con mucha responsabilidad, aunque antes tenemos el reto de las Elecciones Europeas. No es una frase hecha, sino una realidad, que las elecciones se preparan desde el día siguiente a las últimas. En este sentido, el PP obtuvo un resultado histórico en mayo de 2011 y estamos orgullosos del trabajo y esfuerzo que están haciendo todos nuestros alcaldes y concejales en unos momentos muy complicados. Confiamos en que ese trabajo sea reconocido por los ciudadanos.

¿Cuáles cree que van a ser las claves de la campaña de 2015 desde el punto de vista comunicativo?

A día de hoy seguimos en una crisis económica con unas dramáticas cifras de desempleo. Esta realidad sobrevuela cualquier debate y aunque los debates locales deben tener su protagonismo, la percepción personal que la gente tenga sobre cómo estamos respondiendo, cada uno desde su responsabilidad, a esta crisis, sin duda influirá en su decisión.

¿Estamos cerca del fin del bipartidismo en España?

Cuando en el Congreso o el Senado hay más de 10 partidos representados, cuando en Parlamentos Autonómicos y corporaciones locales hay 3,4 o 5 grupos políticos, cuando ha habido gobiernos con y sin mayoría absoluta, incluso coaliciones, no se puede hablar de bipartidismo. Otra cosa es que, a nivel nacional, sólo hay 2 partidos con opciones claras de formar Gobierno, pero eso no es bipartidismo y, en cambio,  es algo muy normal en el resto de democracias. También es cierto que ante esta crisis económica, los ciudadanos miran y castigan más a quienes han tenido responsabilidades de Gobierno o las tienen ahora, y eso se nota en las encuestas. Desde luego ninguna responsabilidad se exige a quien nunca ha tenido – y parece que a corto  plazo tampoco- opciones de gobernar. Eso se nota en las encuestas y en los posicionamientos fáciles, cuando no populistas, de algunas formaciones.

Una campaña de comunicación de partido ejemplo de éxito.

Creo que en estos momentos está funcionando bastante bien la campaña del Partido Popular “EN LA BUENA DIRECCIÓN” que iniciamos en la Convención Nacional en Valladolid. Desde un punto de vista técnico y de imagen estamos logrando unidad de imagen y mensaje a nivel nacional, regional, provincial y local. Y desde el punto de vista político, sin caer en triunfalismos ni vender “brotes verdes”, estamos siendo capaces de trasladar a los ciudadanos que, aunque falta mucho y lo sabemos, aunque hay mucha gente que lo sigue pasando mal, las reformas están comenzando a dar sus frutos y hay datos que invitan al optimismo. Nosotros, al igual que una mayoría de españoles tenemos ganas de mirar al futuro con optimismo, hay motivos para ello.

Su referente político.

En la historia diré que Adolfo Suárez recientemente fallecido. Fue un ejemplo de altura de miras en unos momentos muy complicados. El régimen de derechos y libertades que hoy disfrutamos es el pilar de una democracia, la española, de la que Suárez fue su principal arquitecto. Pero a día de hoy valoro más que a nadie a nuestro Presidente Mariano Rajoy. España estaba en la quiebra y al borde de la intervención cuando llegó a la Moncloa y, fiel a su estilo, está logrando darle la vuelta, recuperar el peso de nuestro país, llevar a cabo las reformas históricas que España tenía pendientes y mantener un sistema de bienestar viable que siga siendo referente internacional.