Ya está abierto el plazo de inscripción para la sexta edición del Postgrado de Dirección de Asuntos Públicos (PDAP) que comenzará el próximo 19 de febrero de 2016. Para conocer de cerca cómo es el programa, qué aportan los contenidos enseñados y el perfil de nuestros alumnos, a lo largo de los próximos meses compartiremos las impresiones de varios ex alumnos de las cinco primeras ediciones del PDAP, el primer programa especializado en lobby en España.
El primero de ellos es Iñigo Garde García, responsable de las Relaciones Institucionales de Endesa y ex alumno de la tercera promoción del PDAP. Según su experiencia en el programa y en el sector energético, considera clave entender cómo funciona la Administración, quiénes son los tomadores de decisiones y “no caer en la percepción de que los asuntos públicos son meras relaciones públicas”.
¿Cómo ha aplicado los conocimientos adquiridos en el PDAP en su vida profesional?
El PDAP por su estructura y contenidos es una herramienta complementaria al trabajo que se realiza desde Relaciones Institucionales y/o Asuntos Públicos. Podría enumerar muchísimas cualidades que he reforzado tras mi paso por MAS Consulting pero destacaría la capacidad de analítica de los problemas a los que se enfrenta una empresa respecto a la toma de decisiones de la Administraciones Públicas. El saber escuchar, tratar de comprender y acertar en la actuación es pieza fundamental en el día a día de nuestra labor, por tanto, ha sido de gran ayuda en mis quehaceres diarios. Tener de profesores a personas reconocidas que han pasado por puestos de relevancia en la Administración permite conocer a la persona que tenemos enfrente: son personas que luchan por el bien de España y, por tanto, aun teniendo aspectos que dan lugar a confrontación, hay que comprender que lo que va bien al país revierte en el bien del sector empresarial.
¿Qué características debe tener un profesional de los asuntos públicos en el sector energético?
Llamarlo características a determinados perfiles denotaría que los que trabajamos en Asuntos Públicos somos bichos raros o especiales. Como tónica general debe ser un perfil que conozca muy bien el negocio en todas sus vertientes. Hay que hablar con personas de la Administración que están muy preparadas en nuestro sector y, por ende, debemos conocer todos los entresijos técnicos del mismo. Por completar: debe ser una persona empática, seria, sistemática y transparente. No se puede caer en la percepción de que los asuntos públicos son meras relaciones públicas, todo lo contrario diría yo.
¿Cómo está la representación de intereses del sector de la energía en España en comparación con otros países?
El sector de la energía, como espero sea en el resto de sectores, siempre ha sido un sector muy dialogante. Somos un sector bastante regulado y, por tanto, las relaciones que debemos mantener con las instituciones públicas deben ser las mejores. Últimamente pareciera que el sector ha estado enfrentado a la Administración Pública y no, todo lo contrario. Venimos de una reforma profunda del sector, pero a mi entender han sido necesaria y con ello se ha conseguido estabilizar un sector que podríamos decir se encontraba en una situación muy difícil, con un desequilibrio entre ingresos y costes altísimo que hacían que estuviera casi en quiebra. Nuestra posición siempre es dialogar, debemos estar al servicio de la Administración y de la sociedad. Proporcionamos un servicio considerado como bien esencial y debemos luchar para que la prestación de ese servicio sea en condiciones ventajosas tanto para el consumidor como para las empresas que formamos parte del mismo.
Respecto al resto de países, en mi experiencia en el sector, puedo decir que es muy similar al nuestro. La inmensa mayoría de los países europeos y latinoamericanos cuentan con empresas energéticas de un tamaño muy considerable, en la que trabajan miles de empleados y las que dan trabajo indirecto a una parte muy importante del PIB de cada país. Por tanto, la defensa de los intereses energéticos debe ser un objetivo prioritario tanto para el país en sí como por parte de las empresas que forman parte de él.
Tras cursarlo, ¿cuál cree que es el perfil ideal para participar en el PDAP?
Un profesional que quiera cursar el PDAP debe tener un perfil conciliador, muy comunicativo y siempre debe estar orientado a los resultados, pero sin desmerecer que con sus actuaciones el objetivo es lograr un bien común entre el sector público y el sector privado. Se trata de conjugar las relaciones institucionales con estamentos públicos y las empresas basadas en un win to win. De nada sirve tener una posición enroscada defendiendo los intereses de una empresa, por muy importante que sea ésta.
Sin duda, la persona que quiera tener una visión completa de su empresa el PDAP es una magnifica experiencia en la que poder compartir diagnosis y estrategias públicas con profesionales y profesores de otras empresas y administraciones.
Una clase inolvidable…
Sin duda, la que nos impartió, y a mi parecer de manera magistral, Alejo Vidal Quadras, persona entrañable, magnifico comunicador y muy bien preparado en todos los aspectos. Es leyenda viva del Parlamento Europeo y sin duda un magnifico as a tener en cuenta por los actuales partidos políticos. Es de justicia reconocer que debe seguir aportando a la unidad europea en representación de España.